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El Yugo de Orión (intro-book)

Libro de David Topí (https://www.davidtopi.net/)

Un libro sobre el sistema de gestión de la humanidad en la Tierra y como hacemos para pasar de nivel evolutivo Nueva edición revisada y actualizada 2019

Reservados todos los derechos. «No está permitida la reproducción total o parcial de este libro, ni su tratamiento informático, ni la transmisión de ninguna forma o por cualquier medio, ya sea mecánico, electrónico, por fotocopia, por registro u otros métodos, sin el permiso previo y por escrito de los titulares del copyright. »

ISBN: 978—84—120075—2—7 Depósito Legal: DL B 6753—2019

A todos aquellos que están conmigo en cada momento, en cada actividad, en cada viaje. Invisibles al ojo humano, protegiéndome, guiándome y animándome. Porque hacen su trabajo como si tal cosa, para que yo pueda hacer el mío sin preocuparme. Gracias.

Índice

Primera parte: el sistema de vida en la Tierra 25

Segunda parte: cómo funciona el mecanismo de control

Tercera parte: la estructura del sistema de gestión de la humanidad

Entender las estructuras físicas del sistema de control -

Cuarta parte: el futuro no esté escrito en piedra

Libros de David Topí

Este libro que tienes en tus manos no se supon ía que iba a ser el siguiente que iba a escribí r. De hecho, tengo más de cien páginas escritas de otro, cuya publicación he querido retrasar, porque ten ía que comprender e i nvestigar ciertos temas de ese nuevo libro. Antes que nada, necesitaba sentir que había sabido comprender y explicar ciertos aspectos complejos de nuestra existencia en los que personalmente estoy interesado. Resultó que, a medida que investigaba para completar esos puntos del otro libro, surgió tal cantidad de información y material que, al escribirlo, tomó forma por sí solo en esta obra que lees ahora.

Así que este es el tercer volumen de la serie ”Infinite”, que inicié con El poder de la intuición y que siguió con la publicación de El Yo Interior, los dos libros anteriores en los que he ido plasmando todo aquello que personalmente he ido encontrando y aprendiendo en mi propio camino de crecimiento personal.

Dicen muchos refranes populares que sin esfuerzo no hay recompensa, o que nada que valga la pena se consigue sin que pongamos de nuestra parte tiempo, recursos, energía, atención, dedicación, etc. Esto, que en el mundo físico es más que cierto, lo es mucho más en el mundo no físico, espiritual, energético, de crecimiento personal. Porque los esfuerzos no están destinados a conseguir algo externo, sino a cambiarnos a nosotros mismos. En estos temas, los resuItados solo se obtienen cuando uno se decide conscientemente a recorrer el arduo camino del despertar interior. Los que segu ís mi trabajo sabéis que estoy metido en muchos frentes. Pero no se trata de dispersión ni de que me i nteresen tantos temas que quiera abarcar un poco de todo. Lo que ocurre es que mi propia experiencia me ha hecho separar en tres grandes tramos el camino de crecimiento personal por el que transito, y, por consiguiente, en esa forma transmita y comparto lo que voy aprendiendo.

No podemos empezar a comprender cómo funciona este juego de la existencia en el que estamos involucrados si no entendemos cómo han maní pulado el tablero de juego que usamos. Esto quiere decir que es necesario romper la visión actual promulgada por las estructuras sociales, económicas y educativas sobre cómo es la realidad de ah í fuera. Esta no tiene nada que ver con la realidad que nos venden los medios de comunicación, nuestros I íderes pol íticos, los grupos que manejan los hilos. Los que ya habéis pasado esta fase y veis claramente la manipulación a la que nos han sometido estáis ya cansados de los artículos que sigo publicando acerca de las mentiras sobre la situación geopol ítica del mundo, sobre la alimentación y la salud, sobre la manipulación de la historia, la econom ía, etc. Los que aún estáis en la fase de descubrir que nos han tomado el pelo, seguís pidiendo más información para poder romper esa visión actual y comprender mejor por qué pasan las cosas que pasan. Como decía un alumno tras uno de mis cursos: ”He salido cabreado con el mundo porque me he dado cuenta de cómo me han timado todos estos años”. Todos pasamos por esta primera fase del despertar interior. Descubrí r que lo que creías que era real no lo es, que absolutamente todas las cosas que parecían de una forma son de otra, es un shock para algunos, y es un proceso natural y paulatina para otros. Pero, cuando se rompen ciertas est r ucturas, tienes dos opciones: cerrar los ojos y no querer ver nada más, volviendo t ranquilamente al sueño ilusorio en el que todo es bonito, o tirar hacia delante y term inar de desmontar la visión que nos cuentan sobre lo que pasa en el planeta, en todos los niveles, para poder liberarnos de ese control y manipulación lo más rá pida mente posible. Pero la evolución personal, espiritual, no se term ina cuando uno despierta a la realidad del m undo, si no que, en ese momento, no hace más que empezar, ya que es entonces cuando se te activan las ganas de conocer más, especialmente de conocerte a ti mismo, entre otras cosas porque descubres que tienes en algún Iado un potencial latente impresionante a la espera de ser activado. Descubres que hay una parte de ti, que algunos lla mamos el Yo Superior, que te sirve de tu ía y de brúj ula permanente; te das cuenta de que la meditación es una maravilla y no entiendes cómo no la enseñan en la escuela desde pri maria; ves que tienes un montón de posibilidades de tra bajar con entidades que llamamos guías; descubres que tus lecciones de vida se pueden aprender sin tener que sufrir co n ellas y que tienes una misión que cumplir, escogida por ti mismo, para ver si echas un cable al planeta, para reorientar nos un poco y sacarnos del pozo energético en el que estamos metidos. Y todo esto en paralelo con lo anterior. Yo no dejo nunca de investigar y aprender cómo funciona el m undo real en el que vivo; de tratar de desmontar las mentí ras de las estructuras que me han impuesto y que, por ignorancia, he aceptado, por lo que además tengo que ad mitir parte de mi responsabilidad de que el m undo esté como está. Como todo esto forma parte de mi trabajo personal, sigo rompiendo mi propia visión de las cosas externas, buscando entender la realidad de la forma más objetiva posible, mientras continúo trabajando en mi autoconocimiento y despertar interior y adquiriendo cada vez más herram ientas. Así, cuando tienes más o menos ubicada la realidad de esta tercera dimensión, cuando no te dejas maní pular tan fácil mente por elementos físicos y no físicos, cuando has superado una serie de ataques del sistema por querer desconectarte del m ism o (y hacer que otros tam bién lo logren), entonces llega, al menos en mi caso, la sed de conocimiento cosmológico: de entender el universo, la Creación, los niveles evol utivos, las polaridades, el resto de los seres, la conciencia, las energías, las formas evol utivas, etc. Ya no te con formas con fuentes de bajo nivel para que te expliquen las cosas, porque, además, tienes un pel in más desarrollada la intuición (de hecho, poco a poco, se activa lo que esotéricamente se conoce como el centro i ntelectual superior, que es capaz de discernir energéticamente cosas que son verdad de lo que no lo son, y eso te hace “i ntuir” rápidamente si algo es correcto o es desinformación, o si las cosas está n mezcladas y hay que separar la paja del trigo). Lo único malo de esta etapa (que sigue en paralelo con las dos anteriores, porque, ya metidos en el tema, no se puede tra bajar solo en una dirección ) es que ya no hay vuelta atrás. Es decir que, cuando te pones a ver si eres capaz de entender conceptos metafísicos, esotéricos, místicos, espirituales, etc., no tienes otra cosa en la cabeza hasta que no vas atando cabos y uniendo las piezas del Tetris que conforma la suma del juego físico y del juego no físico de tu existencia.

En realidad todo este proceso es bastante divertido, a pesar de que pasas por épocas de bajón mental, anímico, energético, etc. Cuando estás en la primera fase, hay momentos en que, si se desmontan muchas cosas de golpe, uno se queda bastante tocado y cuesta rehacer la visión de la vida con la nueva información adquirida, lo que no es más que aceptar que uno de los múltiples filtros y velos que ten íamos en los ojos se ha caido para siempre. Mientras trabaja s en ti en la segunda fase, hay momentos en los cuales energéticamente estás por los suelos, sobre todo si vas sanando heridas del pasado, traumas, bloqueos autogenerados, cosas que arrastras de otras encarnaciones, etc. Si tienes que estar pendiente de ataques psíquicos o energéticos, hay d ías que lo pasas mal. Pero, como dice el refrán, “lo que no te mata te hace más fuerte” (o algo así), por lo que todo forma parte del mismo proceso de crecimiento. AI mismo tiempo, sigues en la tercera fase, y hay días que no hay forma de dormir, porque estás rompiéndote los cuernos, tratando de entender mentalmente el concepto X o el concepto Y: que si el tiempo no existe, que si todo es simultá neo, que si el alma esto, que si las dimensiones paralelas, que si lo otro. Afortunadamente la brújula i nterna que representa la conexión con el Yo Superior está siempre ah í para echar un cable, y entonces se te enciende la Iuz, te I lega mental mente la explicación de las cosas, te levantas a las dos de la ma ñana, lo anotas todo, haces un esquema y te vas a dorm ir.

Más o menos todo este proceso está contenido en este libro, que es d Oferente a casi todo lo que he escrito anteriormente, ya que trata de ser una explicación al enorme rompecabezas que es la vida en nuestro planeta, aunando la parte más espiritual de la misma con la parte más física, te rrenal, y de pura actualidad. Lo que he querido es comprender qué hago yo aqu í en este m undo, en el que sé que estoy de paso, en una escuela, en pos de un aprendizaje y un crecim iento, y para ello necesitaba en la zar todas las facetas y á reas de la vida de las que me veo rodeado a diario. He t ratado de reflejar la realidad de este momento que estamos viviendo, el control de la sociedad por un grupo de personas con carácter psicopático, que buscan su propio beneficio, mientras suceden cambios en el planeta que lo están poniendo lite ral mente patas arriba: la i nteracción con ciertas energías llegadas de los confines del universo; los sam bios físicos que se está n produciendo, y el posible, y probable, salto de nivel evolutivo en los próximos a ños para algunas personas.

Me da ba cuenta de que todo eso debía tener sentido y tenía que estar conectado de alguna forma, tenía que haber datos que pudiera verificar y usar para atar ca bos y tenía que poner en su sitio todos los temas que, a lo largo de estos a ños, han aparecido en mi vida. Todo, para llegar a entender que vivimos en un m undo totalmente bajo el control de un grupo de entidades de un nivel evolutivo que no percibimos, cuyas marionetas han implementado un sistema de control en el planeta que nos asfixia cada vez más, porque simplemente somos recursos baratos, prescindibles, y por supuesto, alimento energético. Pero de todo eso hablaremos largo y tendido en las próximas pági nas.

David Topí

Introducción

Cuando la pel ícu la The Matrix se est renó en el año 1999 y dio a conocer un escenario según el cual todos nosot ros viviría mos en una proyección holográfica creada para mantener un sistema de control sobre las personas, simples pilas de energía para un m undo dom inado por máqui nas, solo unos cuantos se pararon a pensar que aquello podía ser algo más que una buena trilogía de Hollywood.

Pero, poco a poco, con el paso de los años, gracias a las publicaciones, experiencias e investigaciones de muchos de los que están en esa Matrix, la cosa realmente pinta de otra forma. Estadísticamente, por pura matemática, en un mundo normal, gobernado por el libre albedrío de sus habitantes, los sucesos, acciones, situaciones o experiencias que suceden y se manifiestan a nivel global deberían comprender aproximadamente un cincuenta por ciento de eventos positivos y un cincuenta por ciento de eventos negativos. Si partiéramos del supuesto de que las personas tendemos a generar y a trabajar para originar elementos positivos en nuestras vidas, que indudablemente tend rían algún tipo de repercusión a nivel global, podríamos vivir en un planeta en el cual el setenta u ochenta por ciento de las cosas que suced ieran podrían etiquetarse como “buenas”. Si n em bargo, creo que esta mos de acuerdo en que ocurre más bien todo lo contrario. Según el cient ífico suizo Jean-Jacques Babel, en los últimos cinco mil seiscientos años la humanidad ha I uchado en catorce mil quinientas guerras, y ha habido tres mil quinientos millones de muertos en ellas (casi la mitad de la población actual). A principios de los años noventa, había cincuenta y dos guerras y conflictos en el planeta, con ciento cuatro ideologías distintas oponiéndose las unas a las otras.

Una de las razones de esta situación es sutilmente deducible: en algún nivel, nuestra realidad y esos sucesos parecen estar manipulados para que provoquen exactamente lo contrario de lo que de forma natural, a priori, suceder ía. Quedan incluidas las teorías de que la maldad es inherente al ser humano, que es posible, que somos una raza que tiende al caos, a la autodestrucción, al co nflicto. Esto es correcto, principalmente ya que estamos polarizados de esa manera, y porque es parte de nuestra naturaleza, o eso creemos. Pero yo no conozco a nadie a quien no le guste ser feliz y viví r libre de problemas o, por lo menos, libre de problemas de una escala tan enorme que no pueda solucionar de ninguna manera. A esos niveles, no se entiende la situación del planeta si no es a través de alguna forma de distorsión y maní pulación, consciente o inconsciente, de la deriva de la humanidad, con o sin un fin concreto.

El problema es que, cuando uno se pregunta de dónde viene esta hipotética maní pulación, en térmi nos macro sociales, macro económicos y macro energéticos, cuando empiezas a i ndagar, excavar, sortear y digerir información, a separar cada pequeño trozo de verdad de miles de trozos de desinformación o información contradictoria, desembocas inexorablemente en teorías, hipótesis y supuestos sobre conspiraciones, grupos de manipulación secretos (y no tan secretos), niveles de conciencia superiores, otras dimensiones, entidades de otro tipo y otros planos frecuenciales, etc. Y claro, aqu í es decisión de cada uno dónde poner el Iímite de lo que se quiere o se es capaz de creer.

La disparidad entre lo que las personas en general percibimos como real y las verdaderas dimensiones de esa realidad es increíble. Es tan increíble que muchos bloqueos mentales, i nnatos en las personas, se activan cuando son expuestas a este tipo de información y, sencillamente, se mira para otro Iado, porque se siente que no se puede hacer nada cuando la estructura de nuestra realidad, tal y como creíamos que era, se ve amenazada y de repente se desmorona. Ya que nada es realmente como pensábamos que era.

Básicamente la población humana ha sido guiada ciegamente por un sinfín de falsos caminos, y maní pulada según ciertos intereses y agendas, muchas veces contradictorios, entre varios grupos, que han provocado todo tipo de acontecimientos con nefastas consecuencias para el grupo teóricamente más frágil: la masa general de la población.

La información está tan compartimentada, y ha sido tan manipulada y escondida, que lo que uno cree que sabe no es sino una fracción de lo que saben aquellos que se encuentran en un escalón superior en los círculos y estructuras de poder del planeta. De hecho, la i nvestigadora, historiadora y escritora Laura Knight escribió una vez que lo que una persana normal sabe al salí r tan ricamente con su título universitario bajo el brazo no es sino un 0,02 por ciento de lo que en realidad saben aquellos que están en las posiciones de poder más altas en este planeta, los que controlan el juego en el que estamos metidos.

Si ya nos cuesta aceptar que un grupo de políticos se reúna para crear una guerra por motivos económicos o geopol íticos, tcómo no nos vamos a resistir a aceptar que hay entidades de otros I ugares que nos tratan como elementos prescind ibles, sujetos para experimentar, peones en un tablero que manejan a su antojo e i ncluso como comida*

Parte de este proceso de supresión de la información está diseñado para mantener estas estructuras de poder sobre las que hablaremos más adelante, para negar la existencia de niveles fuera de aquellos perceptibles por el humano medio, especialmente en lo que concierne a la interacción y sumisión a otras razas o-p/c/net durante milenios. Abrirse a estos otros niveles de realidad no está al alcance de todo el mundo. Es más, no todo el mundo quiere ni debe hacer lo. Ya se encargará nuestra destino, dependiendo de los planes evolutivos para nuestra encarnación, de acercarnos a la i nformación, abrí mos la puerta a ciertas realidades o cerrar el candado a cal y canto para que no nos enteremos de todo esto y evitar así que suponga un problema en algún sentido. Lo que es más importante aún es que quien quiera o necesite darse cuenta ya lo hará y quien quiera mantener los ojos cerrados tiene todo el derecho de hacerlo. Si de los siete mil quinientos millones de personas, una gran mayoría no tienen más interés que el de disfrutar de la realidad material y física en la que se encuent ran ¿ pensá is que los niveles superiores de esta est r uctura de poder tienen m uchas dificuItades para mantener a la gran masa de la humanidad bajo cont rol? Aquellos que son conscientes de que todo esto parece más un circo que otra cosa siguen creciendo en número, y se empie za a hacer m ucho ruido para hacerles notar a los de arriba que los de a bajo se empiezan a cansar de tanta manipulación. Pero difícilmente podrá el sistema actual derrumbarse mient ras no se produzca un cam bio de paradigma y situación total. Para consegui rlo, es nec es aria que los que estamos aqu í consigamos enderezar, cam biar o atenuar los sucesos que nos esperan. Para ello hemos de seguir en la senda por la que estamos transitando en estos momentos. En la película, Morfeo le dice a Neo que Matrix es ”el mundo que fue plantado ante sus ojos para esconderle la verdad (…) y mientras exista Matrix, la humanidad no puede ser libre”. Pues bien, quizá va siendo hora de empe zar a desmontar la. ===== Primera parte: el sistema de vida en la Tierra ===== Un sueño para ser libre Hace tiempo que vengo practicando diferentes téc nicas de meditación que he aprendido a lo largo de los años, y uno de los ejercicios que más me gustan sirve básicamente para encontrar respuestas a problemas o preguntas; respuestas que en un estado normal de conciencia no se alcanzan, pues requieren conectar con el subconsciente, el inconsciente colectivo o el propio Yo Superior. En una de las sesiones de práctica, puesto que no se me ocurría ningún problema específico que plantear, decid í preguntar de forma general cuál era la información más i mportante que necesitaba conocer en ese momento. Durante la sesión no suced ió nada en particular, pero unas pocas horas después, al irme a dorm ir, tuve un sueño Iúcido particularmente vivo. En ese sueño me encontraba con otras dos personas m uy cercanas a mí en una especie de base subter rá nea extremadamente grande, una especie de macro gimnasio con cientos de kilómet ros de largo, Ileno de diferentes espacios pero sin separaciones entre ellos. Ha bía m illones de personas haciendo ejercicio vigorosamente, trabajando dura y sudando a raudales. Nadie estaba especialmente contento con esa actividad, porque perci bían que eran controlados por unas pocas personas (que no pude ver, pero que pude notar). Las personas que hacían deporte (pues estábamos en un gimnasio) de cuando en cuando cogían una botella vacía que te nían cerca, la Ilenaban con su energía y se la pasaban a los controladores. Todo lo que veía en el sueño era blanco puro, ultra limpio, y recuerdo que me sorprend ía mucho no ver ninguna especie de barrera o separación entre las diferentes zonas (por ejemplo, entre aquellos que usaban bicicletas estáticas y los que levantaban pesas en la sección de al Iado). Y sabía que todo era falso. Éramos esclavos, nos explotaban para extraernos la energía. Alguien me dijo en el sueño que era muy difícil sobrellevar ese conocimiento, y que era mejor que me hiciera a la idea de que no i ba a ser fácil transmitir algo así, si es que deseaba hacerlo. Mis amigos y yo no hacíamos ningún deporte, sino que tratábamos de encontrar una forma de escapar de aquello. Nos escondíamos y pasábamos de una zona a otra procurando no ser vistos por los controladores. Encontramos unas enormes escaleras que ascend ian. De nuevo, todo era blanco, totalmente pulido, limpio, radiante. Nadie controlaba esa salida, como si no fuera necesario. Es decir, se podía salir, nada lo imped ía. Así que empecé a correr, empujé a mis amigos y fuimos hacia la escalera. Pero, de repente, una de las personas que me acompañaba quiso cambiarse de ropa (cosas que pasan en los sueños) para estar más cómoda. Mientras nos acercábamos a las escaleras, vimos una salita de televisión con dos baños, claramente marcados para hombres y mujeres. Decenas de personas miraban la televisión, mientras hacían una pausa para descansar del deporte. Entonces entendí que esa era la razón por la que nadie escapaba: la televisión los manten ía a todos en un nivel de conciencia en el cual ni siquiera se daban cuenta de que existía la posibilidad de correr para salir de allí. También me di cuenta de que los ba ños tan claramente señalados servían para hacernos creer que estábamos separados los unos de los otros. Lo bueno era que se pod ía salir de allí. Lo malo era que nadie lo sabía. Entonces desperté y me puse rápidamente a escribir lo que había soñado para no perder detalle. ===== Mi interpretación personal ===== Cuando comentó el sueño con las dos personas que salian en él, ambas lo i nterpretaron de manera similar, lo cual me hizo pensar que quizá no fuera tan difícil transmitir el mensaje que implica ba (y que yo al menos, al despertar, tuve muy claro): • La gran mayoría de los humanos vivimos como borregos sin saberlo, obedeciendo órdenes sutiles, que casi no parecen órdenes, de unos pocos controladores : empresas, gobiernos, bancos, etc. Nadie te apunta con una pistola y te obliga a hacer nada, sino que se hace con leyes, obligaciones, a veces disfrazadas de derechos, que siempre se presentan como buenas y necesarias, y que a veces lo son, como parte del entendi miento que todos necesitamos para vivir juntos, pero que muchas veces restringen, obligan, controlan y limitan. Las d ictan las élites dentro de las élites, organizadas de forma piramidal y/o circular. En lo más alto, solo unos pocos, muy pocos, tienen el control sobre todos los demás. Los niveles medios de la pirámide, que también creen que tienen cierto control, están a su vez manipulados por los de más arriba. • Vivimos sumidos en un mundo en el cual se nos mantiene atontados para que no sea demasiado difícil controlarnos. Los medios para lograrlo son la televisión en primer Iugar, pero también la pésima educación que se recibe por los canales oficiales, la publicidad, el consumismo masivo, las largas horas de trabajo para ganarnos el pan, etc. • Se nos mantiene en un estado de miedo y preocupación constante: atentados preparados por los mismos que proponen las soluciones para evitarlos, pandemias y enfermedades creadas en laboratorios y esparcidas por el planeta, guerras y conflictos en los cuales ambos bandos están financiados y manipulados por las mismas personas. Siempre, además, desde una perspectiva que nos hace sentir impotentes, sin poder para solucionar nada, ya que se nos induce a creer que no tenemos ningún control sobre esos problemas y debemos confiar en nuestros dirigentes para que tomen las medidas necesarias. • Se nos hace creer que estamos divididos, que somos enemigos unos de otros, que la derecha radical se opone a la izquierda radical, cuando los que han creado ambos sistemas son los mismos grupos que mueven los hilos y financian ambas partes. Se hace énfasis en la separación de la gente. Se invierte en energía y recursos en todo aquello que divida a las personas, y nunca en lo que nos une. ◦ Se nos exp lata económicamente, a través de todo tipo de artimañas. Se crean mentiras a escalas planetarias para crear impuestos y subir tasas. Se crean crisis económicas para que la gente no tenga otra preocupación más que su hipoteca, su trabajo y sus pocas posesiones. ◦ Se crean todas esas distracciones, y muchas más, para que no prestemos atención a otras cosas también muy importantes, sobre las cuales esas élites no tienen control: los cambios en el planeta. ◦ Nos fomentan que busquemos la solución a todo fuera, que nos mantenga mos separados lo máximo posible de lo que llevamos dentro, que no es nada más ni nada menos que el poder de ser lo que queramos, cuando queramos y como queramos. Ese poder nos llevaría directamente a la felicidad, y destruí ría por completo el control que ejercen sobre nosotros aquellos que nos manipulan. Donde hay consciencia, no existe forma de control que pueda con ella. El problema es que no sabemos nada de esto último o, más bien, que le ponemos etiquetas a este conocimiento, como movimiento “nueva era” o “despertar humano”, etc., como si fuera algo nuevo, recién descubierto o recién instaurado. Pero este potencial siempre ha estado ahí, no es nuevo, aunque ser consciente de él para poder desconectar del todo de la Mo trix requiere conocer muchas cosas sobre el sistema de vida en nuest ro p laneta. No sé si pensáis lo m ism o que yo, o si por lo menos tenéis la sospecha de que algo real mente no va bien y que estas cosas que os cuento pueden, quizá pueden, que sean reales. No todo el mundo tiene esa sensación, y no todos los que la tienen creen que realmente sea así porque así está diseñado. Pero la cuestión es que hay algo que no cuad ra en el m undo en el que vivimos, y solo cuando nos detenemos a pensar en ello nos damos cuenta de que, al menos, hay que tratar de entenderlo para saber cómo hemos I legado a esta situación y ver si se puede hacer algo para ca mbiarla. Así que, sea o no cierto que todo lo anterior está causado por una cierta manipulación de los eventos y los habitantes del planeta, la pregunta es si n duda la misma: t por qué? t Por qué tanto empeño, tantas artima ñas, tantas mentí ras, tanta desi nformación, tanta ocuItación de sucesos, tantas manipulaciones y tanto trabajo para controlar el barco en el que viajamos ? ¿Cómo se han creado todas esas estructuras, distracciones y sistemas? ¿ Para qué? La respuesta tiene pinta de ir en la dirección de que de esta forma no prest amos atención a otras cosas ta mbién m uy importantes, que iremos viendo a lo largo del libro. Pero no nos adelantemos… https://www.davidtopi.net/libros