Agradecimientos al trabajo de Robert, Gosia y a todo el equipo de Taygeta y Swaruu
Reflexiones sobre Karma y Dharma
Mari Swaruu: Hola de nuevo. Soy Mari Swaruu. Gracias por acompañarme una vez más y bienvenido a mi canal.
Los conceptos de karma y dharma cambian mucho de un autor a otro y cuando se usan dentro de un contexto religioso, aún más. Los significados verdaderos o iniciales han cambiado mucho, sobre todo porque han sido tergiversados por innumerables personas a lo largo del tiempo quienes, a falta de mejores palabras, los utilizan para describir sus contextos y sus ideas, con lo que también provocan que el significado cambie constantemente.
El lenguaje es fluido y evoluciona a lo largo del tiempo de forma dinámica, casi como si tuviera vida propia, como resultado o como espejo de la sociedad que lo utiliza, por lo que en cierto modo esto es de esperarse. Pero, como he llegado a encontrar, el concepto más usado adjunto a la palabra karma es el de un castigo o como una consecuencia fija de haber hecho cosas malas.
Esta es una explicación extremadamente simplista, ya que es mucho más compleja. Como también se ha definido, sí, karma es más una consecuencia, ya que en un conjunto de comportamientos provocará o causará otro conjunto de eventos.
El karma suele estar vinculado a resultados negativos y la consecuencia de un conjunto de acciones se toma como algo fijo o como un resultado fijo. Por ejemplo, si infringes la ley, serás castigado, o como si colocas tu mano en el fuego, te quemarás. Pero el karma también se puede vincular de esta manera a consecuencias positivas, como en causa y efecto. Definiría esta descripción como un programa de computadora, que usa el diagrama lógico de decisiones, o sea: “if - then - else” (si - entonces - sino).
Pero hay un significado mucho más profundo de karma o de vivir en karma y es renunciar al control que tenemos sobre nuestras vidas, vivir según las reglas de los demás y en un estado mental de miedo, como en el temor al castigo de quien gobierna y controla nuestras vidas. Aquellos que la gente piensa que controlan sus vidas serían las religiones más obviamente, los jefes de toda clase y los gobiernos con todas sus leyes. Leyes que han sido diseñadas para su beneficio y no para el bien, ni para la protección de la población en general y mucho menos se han creado para hacer cumplir algún tipo de justicia real.
Todas las leyes humanas han sido creadas por aquellos que controlan todos los gobiernos, por el Cabal y por sus secuaces que, a sabiendas o sin saberlo, hacen leyes menores, siempre siguiendo las reglas mayores que se les imponen. En última instancia, todo por una sola razón: para controlar la poblacion general, exactamente como una granja humana.
Y todas esas reglas de todo tipo están diseñadas para mantener a la poblacion en general en un estado dividido y en constante temor, con una percepcion catastrofica de la realidad, todo para mantener la frecuencia de manifestacion de las masas lo mas baja posible, para poder continuar explotandolos de todas las formas posibles, ya que la población en este estado solo puede manifestar colectivamente cosas negativas para sí mismas, exactamente como los controladores quieren.
Esa es la razón por la cual siempre hay algo malo sucediendo constantemente, por todo el mundo. Pero ni siquiera significa que esas cosas malas necesariamente estén sucediendo. Eso es lo que los controladores quieren que el colectivo piense, para crear un estado mental de baja vibración que, a su vez, manifestarán cosas de baja frecuencia, pero no necesariamente esas cosas exactas que afirman que están ocurriendo.
Vivir de acuerdo con las reglas de los demás y acatar sus reglas, sin crítica personal, ni con ninguna responsabilidad personal sobre las implicaciones reales de seguirlas, y existiendo según los estándares morales y éticos de los demás, asumiendo ingenuamente que esos otros tienen su mejores intereses en mente, es vivir en karma. Porque están acatando el conjunto de consecuencias que esos controladores han atribuido a su conjunto de acciones, como si no existiera otra opción mejor.
Eso significaría que los sujetos que cayeran en esto no tendrían ningún criterio personal, ni personalidad alguna, porque se comportan exactamente como clones, unos de otros, sin otra idea más que obedecer todo el conjunto de reglas que les han sido impuestas, y me refiero a reglas que comienzan con leyes, normas éticas y morales socialmente aceptadas. Y terminan incluso con lo que muchos llamarían leyes de la naturaleza o leyes universales.
Obedecer todo esto sin un verdadero pensamiento personal es también aceptar ciegamente lo que es posible y lo que no, utilizando únicamente los criterios que otros, los que están en el poder, le han impuesto al sujeto.
Todo lo anterior es vivir en karma. Y entonces, en consecuencia, lo que sigue a continuación es vivir en constante culpa y hasta miedo de las acciones que la persona percibe como si no hubiera seguido esas reglas correctamente. Y es este miedo al castigo y la culpa lo que socavará la autoestima del sujeto y, en última instancia, hará que la persona toma un castigo grave después de la muerte y cause la reencarnación posterior, como expliqué antes en otro video, como es la percepción del sujeto, que tiene muchas llamadas “malas acciones” que pagar, porque no fue una persona lo suficientemente buena en su vida pasada. Nuevamente, todo esto, cuando la persona asume que aquellos que le imponen las leyes, tienen una verdad última y también tienen los estándares éticos y morales correctos, que por lo tanto deben seguir.
Pero luego tenemos otro grupo de personas, aquellos que siguen su propio camino, aquellos que se molestan en pensar por sí mismos y que tienen suficiente cerebro y valor para crear su propio conjunto de estándares sobre todo. No me refiero a esas personas que se pueden llamar anarquistas, que ciegamente van contra el sistema y contra casi todo, siempre pensando que están luchando contra sus opresores. Pero con esa actitud solo están alimentando al mismo sistema que dicen querer atacar, debido a que todos esos grupos están fuertemente infiltrados, algunos incluso creados deliberadamente como oposición controlada. Por lo tanto, son parte del mismo sistema, de la misma Matrix.
Me refiero a las personas que saben que sus estándares éticos por los que viven superan con creces los de las personas e instituciones oficiales, aquellos que pretenden imponer sus estándares a la población en general, afirmando que es por el bien mayor. Las personas que son lo suficientemente fuertes como para crear sus propios estándares y vivir de acuerdo con ellos, de acuerdo con lo que piensan y creen personalmente. Y en una mentalidad de servicio a los demás como resultado de un servicio eficaz y responsable a uno mismo, tienen una conexión extremadamente fuerte a la Fuente y, lógicamente, tienen una mayor fuerza vital. Eso a su vez significa que su capacidad de manifestación también es mucho más fuerte y más efectiva.
La responsabilidad personal sobre uno mismo y sobre el alma propia crea una conexión más fuerte con la Fuente y por lo tanto aumenta enormemente su capacidad de manifestación, en proporción directa a la frecuencia de pensamiento del sujeto. Como mencioné antes, el servicio a los demás en la Tierra no puede lograrse bien sin un servicio eficaz y responsable a uno mismo primero, para actuar como base desde donde poder ayudar a los demás. Si solo te entregas a los demás en servicio, pronto no habrá nadie para servir a los demás, ya que terminarás colapsando en el agotamiento, sirviendo a esos otros oportunistas que solo explotan tu buena intención.
En este caso, sería conveniente crear comunidades donde las personas que realmente tienen una mentalidad de servicio a los demás, puedan ayudarse unos a los otros en una sana cooperación, cada persona en mentalidad de ayuda a los demás. Y esos a su vez les regresarán el favor por igual, al no tener ellos ninguna intención de explotación. Y con comunidades, no necesariamente me refiero a personas que pueden vivir juntas, como en un pueblo, aunque eso también sería genial, sino también a personas con ideas afines que pueden trabajar juntas, incluso a miles de kilómetros de distancia.
Vivir en karma es simplemente obedecer ciegamente todo lo que se le impone a la persona actuando con miedo y con culpa. Vivir en dharma es vivir por lo que realmente somos.
Karma es el conjunto de consecuencias de otro conjunto de acciones y muchas de esas consecuencias pueden ser muy artificiales y éticamente incorrectas cuando se ven desde un estándar más alto y un punto de vista más ilustrado. Dharma es encarnar y vivir por lo que realmente somos y todos nuestros atributos, todo lo que define nuestro verdadero yo, desde nuestro punto de vista personal y con plena responsabilidad sobre todo ello.
Dharma sería entonces vivir según quien es realmente el sujeto, construyendo su alma en el proceso. Vivir en dharma es vivir el camino de la iluminación, ya que forma, crea y construye su alma, y como se observa desde arriba, los estándares éticos cambian y evolucionan a medida que el sujeto expande su conciencia y conocimiento.
Si quieren ayudar al mundo y hacerlo un lugar mejor, trabajen en ustedes mismos. Trabajen en sus almas. Eleven su frecuencia y manifiesten cosas hermosas. Todos ustedes, librespensadores que están realmente haciendo un cambio positivo, ni siquiera tienen que luchar de ninguna manera tradicional. Todo lo que tienen que hacer es ser su mejor versión, manifestando una gran vida para ustedes mismos. Si ustedes cambian su mundo personal para mejor, el mundo cambiará a su alrededor y para sus seres queridos.
Gracias por ver mi video.
Con mucho cariño,
Mari Swaruu
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